Y el tío (o la tía Ale) llamó para invitarnos a comer un asadito. Hacía rato que el tío no hacía. Dice que no tiene tiempo, que está estudiando, que no sé qué.
Bueno, la cosa que se no se olvidó como hacerlos y comimos requete bien.
Pero, primero jugamos con los tutús. Es que me gustan los autos. Así que ahí estamos los dos tirados en el piso y esta debe ser una de las primeras fotos que me sonrío a pleno.
No sé si se nota, pero mi papi me achuró las lanas y ya el pelo largo es parte del pasado. Tan chiquito y ya tengo pasado.
Che tío, eso tenés que hacer, poner fotos de cuando yo era bebé. Porque empezaste este blog cuando tenía dos años. De cero a dos, también es parte de mi pasado. Mi pasado bebé.
Ese día eramos más. acá dejo una foto con todos. Chau, un beso.
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