¡Ah! ¡Cómo me gusta el pata pata! No paro un minuto, con frío, con humedad, con sol, hasta con lluvia. De un lado al otro, no paro y no paro y no paro. Si me canso de sentado, lo empujo de parado, desde el living a la cocina (adentro) o desde la cocina al quincho (afuera).
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